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Todo por un abrigo

Francisco Tobías

Denis Diderot fue un escritor y filósofo francés, quien vivió en el siglo XVIII época de la ilustración, sus aportes fueron en distintas áreas, abarcando desde el teatro, la filosofía y hasta en la economía, de hecho, platico sobre este intelectual precisamente por un fenómeno llamado “efecto Diderot”.

En cierta ocasión al ser invitado a una tertulia, donde hubo bebidas, naipes y camaradería, Denis Diderot llegó con un abrigo viejo, anticuado para la época y desgastado, uno de los asistentes al convivio le obsequió un abrigo nuevo, según la moda y de gran calidad. Al día siguiente cuando decidió estrenar su abrigo, el filósofo se dio cuenta que necesitaba comprar pantalón, camisa y hasta zapatos para que el abrigo que le habían obsequiado luciera. Después de comprar el pantalón, zapatos y camisa, se dio cuenta de su comportamiento del consumo, pues una propiedad, en este caso el abrigo, ocasionó una espiral de consumo.

Al comportamiento que se genera cuando una compra te arrastra a otras compras se le conoce como el efecto Diderot. Fenómeno que se sigue presentado en nuestros días y seguramente con mayor fuerza pues, cuantas veces hemos comprado un pantalón y de manera casi inmediata buscamos una camisa para “que combine”, o bien al adquirir un teléfono inteligente, empieza una espiral de compras, como un cable más largo, una batería externa, una funda y hasta un tripié para las fotografías. Incluso hasta la adquisición de servicios nos puede ocasionar una espiral de consumo, como lo es el ingreso a un gimnasio, ya que tendremos que comprar calzado, ropa adecuados, así como algunos accesorios como el termo para el agua.

Existen dos grandes ramas de la economía, una que se encarga de estudiar a los agregados, la cual se llama macroeconomía y la microeconomía se encarga de estudiar como los entes individuales, ya sean empresas o individuos, satisfaces sus necesidades.

Cuando Denis Diderot encontró el fenómeno que lleva su nombre, no dimensionaba la importancia de su aportación en la ciencia económica, pues tanto la oferta como la demanda pueden verse afectadas por dicho fenómeno.

De parte las oferta, quienes venden, utilizan el fenómeno Diderot para aumentar sus ventas y ganancias, los consumidores, es decir la demanda, debe de conocer bien este fenómeno y el comportamiento que ocasiona para no terminar como Deni Diderot, quien murió en la pobreza.

Preparen, apunten, aranceles

Francisco Tobías

El presidente Trump ha impuesto un arancel del 25 por ciento a todas las importaciones que realizan en Estados Unidos desde México y Canadá, más allá de analizar las consecuencias del aumento en los precios que al final pagaran los consumidores norteamericanos o la supuesta contracción en las economías canadiense y mexicana, es interesante advertir que estamos entrando a una guerra comercial, en la cual participaremos los integrantes de la mayor zona económica de mundo.

Con la medida impositiva que decretó el gobierno de los Estados Unidos, hacía México y Canadá, podrán llegar otras acciones similares por parte de los otros 2 integrantes del T-MEC, ocasionando así una escalada de impuestos y restricciones erosionando no sólo el comercio, sino las relaciones políticas y diplomáticas. Entrando así a una guerra comercial, en la cual al final todos saldremos perdiendo.

Las guerras comerciales se generan para debilitar una economía, poniendo barreras, es decir impuestos a las importaciones, y así buscar influir en la economía de otros países, aplicando así una política proteccionista, procurando cuidar el mercado propio además de perjudicar a otro país. Como ejemplo muy actual son los aranceles que Trump acaba de imponer a los productos de México, Canadá y China. Más allá de la justificación de Washington, al asegurar que los aranceles son en consecuencia de la migración ilegal, así como el tráfico desmedido de fentanilo hacia ese país, las consecuencias pueden ser desastrosas para los tres socios comerciales de América del Norte. Pues mientras los norteamericanos tendrán que pagar más en el precio final, Canadá y México sufrirán de contracciones, es decir una reducción en su PIB ocasionando desempleo y desinversión.

Bien valdría la pena recordar las palabras del político e inventor norteamericano, Benjamín Franklin, considerado como uno de los padres de los Estados Unidos de América quien dijo: “Nunca existió una buena guerra ni una mala paz”, frase que el primer estadunidense se refería a la guerra armada y que bien puede aplicarse a la guerra comercial.

Sólo como forma de finalizar mi comentario: los precios aquí en México también van aumentar.

Imprimir dinero

Francisco Tobías

El dinero es la herramienta más utilizada para adquirir bienes y servicios, los cuales nos ayudan a satisfacer nuestras necesidades, pudiéramos llegar a pensar que, si hay más dinero en el mercado, los consumidores tuvieran, por lo tanto, más dinero para así poder realizar sus compras, consumir las mercancías y así satisfacer sus necesidades; y ¿entonces por qué no se imprime más, mucho dinero?

En distintos países, en distintos momentos, por diversas circunstancias las autoridades han decidido imprimir más dinero del que soporta su economía. Por ejemplo, entre 1921 y 1923 Alemania sufrió de hiperinflación, aumento descontrolado y exagerado de los precios de manera muy rápida, cuando ese país europeo tuvo que pagar las reparaciones ocasionadas por la primera guerra mundial. Hoy Venezuela sufre del mismo fenómeno económico, la hiperinflación, también gracias a la emisión, sin soporte económico, de dinero, utilizándolo como una herramienta del populismo.

Pero, ¿cuál es el motivo de que al imprimir más dinero se ocasiona inflación? Cuando hay más dinero en el mercado, a ese dinero los economistas lo llaman masa monetaria, los consumidores tienen el dinero para adquirir más mercancías, afectando así la fuerza de la demanda en el mercado, sin embargo, la oferta, que es la otra fuerza del mismo mercado, no está preparada, por lo que se ocasiona una escasez de las mercancías, provocando que estas aumenten de precio y generando así primero inflación o en el peor de los casos hiperinflación.

En nuestro país la única autoridad, valga el trabalenguas, autorizada para emitir monedas y billetes es el Banco de México (Banxico), el cual es un organismo autónomo, cuyo objetivo principal es evitar que el peso pierda valor por medio de la inflación.

La emisión de dinero está respaldada por la confianza de quien lo emite, Banxico para nuestra economía, y el valor del dinero está relacionado con la cantidad de mercancías que se pueden comprar. Por ello imprimir dinero por imprimir no es la solución a la pobreza, de hecho provocaría más y mayor pobreza.

La mano invisible

Francisco Tobías

Cuando la economía nació como ciencia “formal”, en 1776, surgió la primera escuela económica, es decir la primera corriente del pensamiento que supone afirmar la manera en que funciona la propia economía. Entre los economistas clásicos, término asignado por don Karl Marx, se incluyen pensadores como Adam Smith, Thomas Malthus, David Ricardo, Say y otros más.

El primer economista, quien es incluso llamado el padre de la economía, fue Adam Smith, quien dictó las primeras ideas de cómo funciona la economía, asegurando entre otras cosas, que existen fuerzas, la oferta y la demanda, en el mercado, las cuales interactúan entre ellas mismas, acomodándose para llegar a un equilibrio y así lograr el bienestar social sin la necesidad de que el gobierno intervenga.

A ese actuar “natural”, que provoca el equilibrio entre la oferta y de la demanda, es conocida como “la mano invisible”.

Las teorías neoliberales tienen como base las mismas ideas de la teoría clásica, asegurando que lo mejor que puede suceder en el sistema económico es decir a su mínima expresión la intervención del Estado. Es por ello que cuando se habla de las acciones neoliberales, se hace referencia a las acciones mercantiles, ventas, gubernamentales.

Una de las frases más famosas que existen en la economía es precisamente “la mano invisible”, frase que se le atribuye a Adam Smith, quien supuestamente escribió esa expresión en su libro “La riqueza de las naciones”, enunciado que tiene la misma característica a la del Quijote de la Mancha; quien supuestamente le dijo a fiel escudero “Sancho, dejad que los perros ladren, es señal de que cabalgamos”. Ya que ninguna de las dos frases aparece en sus respectivos textos, es decir ni Adam Smith escribió de la existencia de “la mano invisible”, ni don Miguel de Cervantes escribió, en prisión, alguna frase sobre el ladrido y la cabalgata de sus principales personajes.

Nómadas Digitales

Francisco Tobías

Pareciera que la frase “la historia se repite” se presenta en vida económica de la sociedad y por lo tanto la misma sociedad transita en un círculo terminando donde inició.

Durante la prehistoria, es decir antes de la invención de la escritura, las sociedades eran nómadas, de hecho, hace 2 millones 700 mil años la dispersión en la humanidad inició, por supuesto gracias al nomadismo de las comunidades que estaban asentadas en el África.

Hace 5,225 años se logró construir la primera ciudad del mundo, la cual fue organizada por los sumarios y cuyo nombre era Uruk.

Después de 5 milenios, 2 siglos, 2 décadas y 1 lustro la tendencia de las nuevas generaciones en convertirse en nómadas digitales.

Gracias a las nuevas tecnologías, al proceso de globalización; el cual puede troncarse con la llegada de Trump a la Casa Blanca, y con herramientas como el internet, cada día hay más personas que tiene un trabajo o un empleo totalmente remonto, aprovechando estas características para recorrer el mundo. Existen estudios que afirman la existencia de entre 35 y 40 millones de nómadas digitales en el mundo.

Este tipo de trabajadores han ocasionado un cambio “las reglas del juego” para ellos mismos y han provocado que muchos gobiernos vean en ellos una fuente importante para atraer divisas, es decir dinero de otra parte del mundo. Países como México, Colombia, Brasil y Argentina han emitido una visa especial para este tipo de trabajadores a distancia.

Nuestro país es la segunda economía de América con más nómadas digitales, sólo atrás de los Estados Unidos, se tiene una estimación, que en nuestra economía se encuentra el 5 por ciento del total de los nómadas digitales. En el 2023 este tipo de trabajadores generaron una derrama económica por 524 millones de pesos, equivalente al 15 por ciento de las utilidades generadas por el turismo.

Tal vez la historia no se repita, pero bien lo dijo l escritor Mark Twain "la historia no se repite, pero a menudo rima”.

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