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Las incapacidades

Francisco Tobías

Durante la pandemia la economía mundial ha tenido que enfrentarse a situaciones nunca antes presentadas, provocando con ello que la mayoría de las economías locales sufrieran contracciones en la producción, desempleo, incremento en los precios, pasando a convertirse en crisis o recesiones.

Durante estos casi dos años las autoridades de salud en los países hancambiando algunas regulaciones sanitarias además de los tiempos de resguardo de quienes se han contagiado, con la cepa inicial del Covid-19 quien no tuviera síntomas debería de aislarse por 14 días, el IMSS acaba de anunciar hace poco que con la variante Omicrón el confinamiento debe de ser por 7 días, mientras los Estado Unidos sugiere sólo 5 días de aislamiento, en todos los casos para pacientes asintomáticos, estas medidas distan de la sugerencia realizada por el OMS, el 7 de enero de 2022, donde solicita que el encierro sea por 14 días.

Además de las cuestiones de salud, existe cuestiones económicas por las cuales se han de adecuarse algunas medidas sanitarias ejemplo de ello son los periodos de aislamiento, no es un tema menor cuando analizamos la cantidad de incapacidades, así como sus costos y la perdida en la producción.

En el 2020 el PIB mexicano fue de casi 17 billones de pesos, durante el mes de diciembre de ese mismo año según el IMSS en nuestro país había 19´773,743 trabajadores, cada trabajador en promedio produjo $860 mil, al considerar que en ese año hubo 254 días laborales, en promedio cada trabajador generó alrededor de $3,390. Si cada trabajador contagiado por el Covid-19, asintomático, pidiera una incapacidad por 14 días, de los cuales 12 sería laborales se pierde una producción equivalente a 47 mil pesos. Por ello es lógico que, durante el 2020, el PIB mexicano se redujera drásticamente, cuando hubo un periodo en el cual se paró toda la planta productiva.

Con la variante Omicrón, lo señalé anteriormente, el aislamiento es de sólo 7 días en nuestro país.

Hay un estudio reciente de la UNAM en el cual señala que se podrían esperar para este año cerca de 1.75 millones de incapacidades laborales en nuestro país, provocando una reducción en el PIB de casi 72 mil millones de pesos, cifra de acuerdo a datos anteriores. Pero aunado a esto el IMSS deberá de realizar erogaciones adicionales afectado así el gasto público.

Bajo esta óptica el 2022 se deslumbra como un año con un crecimiento nulo en el PIB, donde el gobierno federal deberá de reajustar sus gastos para poder hacer frente a las incapacidades presentadas ante el IMSS.

Mientras no se realicen políticas económicas destinadas a contrarrestar las consecuencias del Covid-19, se continué jugando “políticamente” con los semáforos epidemiológicos, exista un afán sin razonamiento sobre obras que sólo provocan gasto estratosférico y sin beneficio en términos reales para los mexicanos, la economía no pintará bien para México ni para los mexicanos. Aunque ya es otro tipo de incapacidad.

Deschocolatización.

Francisco Tobías

El señor presidente firmó un decreto mediante el cual, en 10 estados, Coahuila incluido, se podrán regularizar vehículos ilegales de procedencia extranjera.

Esta acción gubernamental tendrá efectos positivos y negativos para la economía y por ende para los mexicanos.

Los grandes ganadores serán por supuesto los propietarios de autos “chocolates” quienes, al cumplir ciertos requisitos, nada restrictivos, contarán con la documentación que les dará estancia legal a sus vehículos en nuestro país.

Estas familias mexicanas incrementan el valor de su patrimonio, pues sus vehículos eran ilegales tenían un precio menor al real mercado, pero al regularizarlo el precio de éstos aumentará. Supongamos que ciertos ciudadanos tienen un auto de los que llamamos “chocolate” con un precio de $30,000; este comprador realiza sus trámites y el pago para regularizar el vehículo al contar ya con papeles que le dan legal estancia en nuestro país, su precio no será de $30,000 si no un precio mayor.

Por el lado opuesto, es decir, de los perdedores por este decreto presidencial hay una cantidad mucho mayor de mexicanos.

Los primeros en perder, otra vez, será a clase media, quienes con esfuerzo la inmensa mayoría adquirirá a crédito un auto nuevo o usado, el valor o precio de este vehículo legal se reducirá por cuestiones de mercado y es que, al regularizar vehículos, la oferta de autos legales aumentará provocando con ello, que los precios de autos usados se reduzcan. Es decir, que si usted tiene actualmente un carro modelo 2013 cuyo valor hoy es de $100,000 al regularizar los autos “chocolates”, su carro ya no valdrá $100,000 si no tal vez $85,000-80,000 pesos.

Además, hay un sector económico que perderá no en el valor de su patrimonio, sino que podrá perder su empleo. En el 2021 se produjeron 2,979,276 autos nuevos en nuestro país, de los cuales 1,019,691 fueron comercializados en territorio nacional, muy inferior a los 18,000,000 de autos ilegales que circulan en nuestro país, según la ley de ingresos de la Federación de la Cámara de Diputados.

Millones de trabajadores en México, poco más del 10%, 6,000,000 de éstos están enfocados en el sector automotriz, una cantidad de trabajadores verán amenazado su empleo, pues al regularizarse los vehículos ilegales se podría frenar la producción de autos nuevos por casi 6 años.

La Presidencia de la República pretende manejar un argumento de seguridad al señalar que con la regularización de estos autos se podrá frenar los crímenes en nuestro país, pues un gran porcentaje de estos vehículos son usados en crímenes, dicho argumento pierde valor cuando lo que debería hacer la autoridad es confiscar todos los autos ilegales en nuestro país por estar actualmente fuera de la ley.

Definitivamente habrá ganadores y perdedores en el mercado y en la economía, a un costo demasiado alto, bien pareciera que AMLO recuerda la frase de Napoleón; “Un chocolate, bien vale la pena”, ¿o no era así?

El cambio verdadero

Francisco Tobías

Es cierto que nuestra sociedad ha cambiado y evolucionado, literalmente, desde que bajamos de los árboles y empezamos a vivir en comunidad, iniciamos a vivir en sistemas económicos, los cuales se han ido transformando hasta en el que vivimos hoy en día, y el cual día a día se transforma y cambia cada vez de una manera más rápida.

Un sistema económico es la forma en la cual se interrelacionan productores, demandantes, gobiernos, instituciones civiles, medio ambiente y la infraestructura. Es evidente que la evolución de los sistemas que iniciaron con la barbarie, atravesando el salvajismo, recorriendo la esclavitud, pasando por el feudalismo, de manera atemporal haciendo su aparición el socialismo el cual coexistió con el sistema que predomina actualmente siendo este el capitalismo. Cada uno de estos sistema se desarrollo viviendo, sus integrantes, cambios importantes e interesantes y hoy tenemos la gran oportunidad de experimentar un cambio trascendental en el sistema capitalista, vivir una economía digital.

Durante la década de los 90´s del siglo pasado inicio la revolución digital mediante la cual hemos tenido, cada vez más personas, de una manera más eficiente y fácil, acceso al uso de la tecnología digital, mediante la cual hemos podido desde comunicarnos, jugar, aprender y hasta realizar compra ventas. Esta oportunidad de interrelacionarnos por medio del internet ha permitido la evolución de la forma en la cual podemos realizar el comercio, naciendo así la economía digital.

Se le llama economía digital al uso de la tecnología digital para realizar actividades comerciales, pero no únicamente cuando se trata de la acción de la compraventa, sino que se incluyen actividades previas, como por ejemplo el stock del inventario y actividades futuras a la transacción como el servicio postventa.

Con la economía digital se ha logrado que ambas partes del comercio, compradores y vendedores obtengan mas beneficios y no necesariamente en términos monetarios, sino de facilidad, de acceso y hasta de calidad. Por supuesto que existen beneficios monetarios con las reducciones de costos para ambas partes del comercio.

Los cambios en la economía desde la barbarie hasta nuestros días, se han generando en gran forma por los cambios o problemas a los cuales nuestra sociedad se ha enfrentado y la pandemia del Covid-19, con todas sus variantes, es un claro ejemplo de ello. Sólo para darnos una idea, según el Banco Mundial las transacciones digitales se han incrementado en más del 50% desde que inicio la pandemia.

Con la llegada y uso de la red 5G, esta economía y su comercio se realizará de una manera aún más rápida, segura y eficaz, trayendo beneficios a los participantes. Nuestra economía nacional tiene el gran reto de integrarse a este “nuevo” modelo el cual nos permitirá tener un mejor nivel de vida, con ciertas comodidades, pero además con mayores responsabilidades. Incluso hay estudios realizados por la CEPAL en los cuales se analiza que con la integración a la economía digital se puede realizar un cambio en la estructura social y reducir la brecha de la desiguadad.

Bien lo dijo Don Carlos Darwin: “No es la especie más fuerte la que sobrevive, ni la más inteligente, sino la que responde mejor al cambio”.

La información es poder

Francsico Tobías

Los economistas utilizamos modelos los que sirven para realizar análisis y así poder explicar lo que sucedió además de “predecir” lo que sucedería, siempre y cuando todos los “asegunes” se cumplan.  Dentro de la gran cantidad de modelos que se han desarrollado en el breve tiempo que lleva de manera formal la ciencia social de la economía, los neoclásicos en el S. XIX, encabezados por el inglés John Stuart Mill desarrollaron el modelo Homo Economicus.

Según estos científicos sociales el Homo Economicus se presenta en los seres humanos o bien en los integrantes de un sistema económico como por ejemplo un banco, los cuales buscan maximizar sus utilidades, es decir intentan alcanzar el mayor bienestar posible, tomando en cuenta que cuentan con toda la información disponible, conociendo las restricciones y oportunidades que existen y existirán por lo menos en el corto y mediano plazo. En palabras llanas el Homo Economicus tiene acceso a información con la cual busca tomas las decisiones más adecuadas para obtener un mayor beneficio.

Hace algunos días el grupo Citi, el cual es uno de los conglomerados financieros más grandes del mundo anunció que vendería la banca comercial Banamex que opera en nuestro país, la cual por cierto, ha logrado utilidades promedio anuales de 2 mil millones de dólares, Citigroup señaló que dicha transacción es una cuestión de estrategia y no de negocios.

Pues bien, en un tipo de mercado oligopólico en el cual existe un reducido número de vendedores, como se presenta en los servicios bancarios, estos oferentes logran acaparar el mercado, establecer precios y son ellos quienes cuentan con la información en forma y tiempo para tomar las mejores decisiones, decisiones encaminadas por supuesto a aumentar sus utilidades.

Entonces, ¿qué vieron o que han pronosticado para la economía mexicana los altos funcionarios de Citigroup?, tal vez divisan complicaciones económicas y legales para hacer negocio en nuestro país, sólo basta con ser realistas para saber que nadie en su sano juicio y menos con la óptica del Homo Economicus dejaría ir una utilidad de mas de 2 mil millones de dólares.

¿Por qué Citigoup dejaría la economía mexicana si es el segundo país, después de Estado Unidos en el cual tienen más presencial? Cuenta con casi mil 300 sucursales en tierra azteca, casi 9 mil cajeros automáticos y tiene más de 31 mil trabajadores.

Si el fin principal de las empresas es generar utilidades para la empresa y sus accionistas, ¿cuál es el motivo de abandonar un mercado, el mexicano, que compone el 10% sus utilidades totales?

Y por si fuera poco el mercado bursátil de Nueva York, el cual es el más grande de su tipo en el orbe tomó de buena gana esta decisión de Citigroup, cuyas acciones aumentaron de valor, al día siguiente del anuncio.

Sólo, tal vez, sólo existe la posibilidad en que Citigroup se comporta de acuerdo al modelo del Homo Economicus y prefirió seguir generando utilidades abandonando una economía en la cual se deslumbran problemas y más problemas, debido a las malas decisiones de la autoridad. 

Bien lo plasmó en su libro “Leviatán” el filósofo inglés, Thomas Hobbes, “la información es poder” e indiscutiblemente en la economía quien cuenta con la información es poderoso y siempre maximiza utilidades.

La cuesta de enero 2022

Francisco Tobías

Inicia el año 2022 y también inicia la cuesta de enero, como se le conoce coloquialmente a los “pesares” económicos del arranque del año.

Este término se ha acuñado haciendo referencia a la inclinación de las calles o carreteras que conocemos como pendientes, las cuales dificultan el transitar haciéndolas más pesadas.

La cuesta de enero es como se le conoce al batallar económico por el cual atravesamos las familias durante este mes, y en ocasiones otros meses más, esto se debe principalmente a dos cuestiones, la primera fue el mal manejo de las finanzas personales durante el mes de diciembre anterior, en el cual al contar con un dinero de más aprovechamos y realizamos algunos gastos innecesarios, el otro factor que provoca la cuesta, es la inflación, la cual se presenta ya que es al inicio del año cuando los precios de las mercancías, así como el cobro de derechos, obligaciones e impuestos se ajustan.

Los analistas prevén que esta cuesta de enero, y no es broma, se alargue hasta junio gracias a la inflación que se ha disparado, no solamente en México. A las consecuencias económicas de la pandemia del Covid-19, las cuales nos han demostrado que tenemos la necesidad de actuar rápido y de una manera racional. Al nulo crecimiento real de la producción en nuestro país, así como a factores como la crisis migratoria, la falta de apoyo a la generación de energía limpia, sin olvidar los aumentos en las tasas de interés por parte del Banco de México y la Fed en los Estado Unidos.

Sin embargo, hay algunas acciones que podemos realizar para aminorar esta cuesta, la cual según los especialistas en la materia será de las más pesadas que se han presentado en los últimos 20 años.

Las recomendaciones son: realizar un presupuesto anual, contemplando todos los gastos, organizándolos del más importante al de menor importancia. De hecho, este presupuesto lo puedes elaborar de manera quincenal. Debes de evitar el famoso “tarjetazo”, así como créditos express, dichas acciones sólo te darán un breve respiro financiero, sin embargo, en poco tiempo te ocasionarán más complicaciones que beneficios. Puedes además evitar algunas compras “innecesarias” para pagar algunas deudas y así salir más rápido de la cuesta.

Para concluir mi comentario te comparto la siguiente frase, que cada día obtiene mayor relevancia: “no confundas calidad de vida, con nivel de consumo”.

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