Rubén Aguilar Valenzuela

En la Galería Casa Coyoacán, muy cerca de la Plaza de Coyoacán, se presenta la exposición "Las Truchas. Ciudad Lázaro Cárdenas", con fotografías de Pedro Meyer, que se inauguró el día que se presentó el libro del mismo título que recoge las fotografías que ahora se exponen.

La edición del libro es un trabajo de Gabriela Olmedo con la colaboración de Ximena Zampayo y los textos que aparecen en él son de Gabriela Olmedo, Patricia Vega y Pedro Meyer. Los tres hablaron el día de la presentación.

La curaduría y museografía de la exposición es de Alexis Ortiz. Transcribo el texto que se encuentra en un panel de la exposición: "En 1979, mientras avanzaba la construcción del complejo siderúrgico en Lázaro Cárdenas, Michoacán, Pedro Meyer fue invitado a elaborar un testimonio gráfico de ese territorio que abrazaba la modernidad y el progreso. Las fotografías del autor responden al contexto cultural, social y político de México en ese momento, y nos ofrecen un panorama amplio en el que la ironía, los placeres y la tecnología se fusionan para construir una narrativa lúdica y esperanzadora".

 

Y continúa: "En esta exposición se presentan las fotografías que el autor ha logrado conservar en su archivo en óptimas condiciones desde entonces y que despliegan un amplio abanico de temas para reflexionar: desde el factor humano que sostiene la infraestructura industrial, los programas de lectura y enseñanza, el comercio, hasta asuntos polémicos como El enano y las putas dentro del bar Tiberio's".

Comentario

Las fotografías en blanco y negro de Pedro Meyer registran una realidad social creada a partir de la decisión del presidente Luis Echeverría (1970-1976), de establecer una siderúrgica en un lugar de la costa de Michoacán. De la noche a la mañana nace una ciudad sin planeación, para alejar a miles de personas que se trasladan por el surgimiento de un nuevo "polo de desarrollo".

La planta siderúrgica Siderurgia Lázaro Cárdenas – Las Truchas (SICARTSA) se inaugura en noviembre de 1976, en uno de los últimos actos públicos del presidente Echeverría, pero había empezado con pruebas a partir de agosto con 4500obreros. Se trasladan a lugar trabajadores de muy distintas regiones del país, con la ilusión de encontrar un empleo fijo y tener una mejor condición de vida, y de ellos casi el 50 % eran jóvenes solteros.

En 1979, tres años después de puesta en marcha la planta, Pedro Meyer incursiona en la ciudad donde hacen su vida los trabajadores. Sus imágenes ofrecen una panorámica, detallada y precisa, de cómo se desarrollan los distintos aspectos de la vida en esa nueva ciudad de la costa michoacana. En la narrativa las personas son el tema fundamental. Muchas de las imágenes expresan situaciones dolorosas y dramáticas. Es la vida real de todos los días también con sus noches.