Flor Rentería

Queridos amigos, el domingo pasado, vivimos una jornada histórica: nunca en México habíamos celebrado una elección así, en pandemia, y no obstante eso, los resultados superaron todas las expectativas.

Siempre me he considerado una demócrata, se ganar, y sobre todo se perder. Cada proceso electoral es único, y refleja el sentir del momento de la ciudadanía y su perspectiva para el futuro. En el 2018, la ciudadanía dio un mensaje que las y los priistas escuchamos fuerte y claro, y hoy, en 2020, los resultados del trabajo y del aprendizaje se han cristalizado en un triunfo atronador.

Que no se confunda este resultado con ninguna otra cuestión: el triunfo del Revolucionario Institucional, obedece únicamente al trabajo constante que ha encabezado desde el inicio de su gobierno el Gobernador Miguel Ángel Riquelme Solís.

El Gobernador del Estado se encuentra ubicado como uno de los Gobernadores mejor calificados del país por su entidad y por la población mexicana en general, y no es para menos: ha demostrado que la lucha y el trabajo se hace desde los cauces de la institucionalidad, siempre viendo los intereses de las y los coahuilenses, haciendo equipo cuando es posible, y pidiendo justicia cuando es necesario.

No debe de olvidarse, queridos lectores, que el slogan de campaña para gobernador de Miguel Riquelme, hace ya más de tres años, era “A Coahuila lo que le corresponde”, y esa ha sido la brújula del trabajo institucional. Hoy en Coahuila el trabajo del Gobernador se nota, y por eso las y los coahuilenses salieron a votar, aún en pandemia, y votaron en un sentido que no deja lugar a dudas ni interpretaciones.

En particular, me siento particularmente feliz del reacercamiento del gremio magisterial al Partido Revolucionario Institucional. A través de la Estructura Magisterial Priista, las y los maestros reencausaron su participación en la que antaño fue su casa y hoy, nuevamente lo es. El PRI es el partido de las causas sociales, y los maestros, son los eminentes gestores de la transformación social. Juntos, fue posible este triunfo sin igual.

Estimados lectores, los demócratas deben de ser demócratas cuando ganan, pero también cuando pierden. Todo mi respeto a quienes tienen una visión ideológica distinta al PRI, pero hoy la campaña termino, y debemos de dejar de lado la camiseta del partido y ponernos la del Estado. La pandemia sigue, y el escenario futuro reclama de todas y todos su compromiso y su trabajo por Coahuila.

Mi felicitación y mi sincero reconocimiento a las y los 16 hombres y mujeres que obtuvieron el triunfo en las urnas. Ustedes, junto con los 9 legisladores plurinominales que se designarán en fechas próximas, tendrán a cargo el llevar las voces de las y los coahuilenses al Congreso.

Lo más importante de este escenario es que sí, aún en pandemia, la gente salió a votar. Esta es la tierra de Madero y de Carranza, la tierra de la democracia, y hoy dimos muestra mundial de que, en Coahuila, la participación ciudadana no se detiene.

Queridos amigos, sigamos trabajando todas y todos, desde nuestras trincheras, para que cada proceso electoral signifique un nuevo nivel de democratización, de justicia social, y de consecución a las causas que nos unen. Juntos, todo es posible.