Enrique Escamilla Cantú

Hola empresario. Emprender y tener un negocio tiene muchos retos. Uno de los más importantes es poder pasar de ser autoempleado a un verdadero dueño de negocio. En este artículo te voy a comentar 3 problemas que seguramente hoy tienes si tú eres autoempleado de tu negocio.

Lo primero que hay que identificar es la definición de autoempleado. La forma más fácil de resumir este estado es cuando una persona tiene un negocio o actividad profesional independiente, que no puede funcionar sin su presencia laboral. Puede ser el caso de un restaurantero que es el que lleva las riendas del lugar y que sin él simplemente el negocio no funcionaría, o el caso de un dentista que es la mano de obra fundamental de su consultorio.

El autoempleado puede estar ejecutando una o varias funciones dentro de su negocio. Puede ser el "todólogo" que literalmente hace de todo, o puede simplemente ser el gerente o el vendedor de su negocio. Muchos empresarios confunden el término cuando son gerentes o directores de su empresa, pero al final de cuentas si tienen un puesto en la organización y la empresa no puede funcionar sin ellos, entonces siguen como autoempleados en mayor o menor medida.

Esto conlleva tres principales problemas que si no son atendidos de forma adecuada pueden frenar el desarrollo de la empresa, o en algunos casos incluso acabar con la organización y los sueños del empresario. Ante esto, me parece importante que definamos estos tres problemas para que los conozcas y te asegures que no te sucedan, y si te están sucediendo, cambies rápidamente la situación para que el futuro de la empresa y el tuyo tengan un mejor panorama.

El problema número uno es que el potencial de la empresa está estancado por la capacidad de acción del empresario. Aunque te consideres una persona extraordinaria, no puedes evitar las 24 horas del día que tenemos todos en el planeta. Si el potencial de la empresa está sujeto a tus horas de trabajo, la empresa no puede crecer porque aunque trabajes mucho, no puedes pasar de las horas que tú como ser humano puedes laborar. En cambio cuando existe un equipo de trabajo con diferentes áreas, capacidades, habilidades y que es capaz de generar resultados, entonces la posibilidad de escalar el negocio se amplía posiblemente hasta el infinito. Cuando logras hacer que la empresa funcione a través de la gente, entonces lo que requieres es más gente o talento para crecer.

El segundo problema es que si la empresa depende de ti, hay una línea muy delgada entre la supervivencia y la quiebra del negocio. Con esto me refiero a que hay cosas que te van a pasar y todo lo que te pase a ti como persona afectará al negocio. Hace unos meses recibí una llamada que me llenó de tristeza. Una persona que ocupaba unas de mis propiedades en calidad de arrendatario, me dijo "Me da mucha pena comentarte que después de 25 años de trabajar y rentar tu propiedad, voy a cerrar el negocio." La razón de esto fue que el dueño –autoempleado- se enfermó gravemente y estuvo 3 meses en el hospital sin poder atender su empresa. Cuando regresó a laborar encontró un caos total que en menos de 90 días llevó a la quiebra 25 años de esfuerzo. Puede ser que te canses, te aburras, te enfermes o tengas que cambiar tu residencia. Todo lo que te pase afectará a tu empresa. Para evitar esto tienes que entender que tienes que dejar de ser indispensable para tu negocio y tener gente con las habilidades necesarias que les permitan operar tu negocio aunque tú tengas que desaparecer por varios meses.

Un tercer problema es que estás dejando de ganar dinero para ti. Así como lo oyes, es posible que ganes más si trabajas menos. Al salir de la operación de tu negocio obtienes algo muy valioso que se llama: tiempo. Con tiempo puedes hacer muchas cosas, un nuevo negocio por ejemplo. Ante este escenario valora las dos opciones: trabajar mucho y ganar las utilidades de un negocio, o trabajar menos y ganar utilidades de 2, 3, 4 o más negocios. ¿Qué prefieres, trabajar mucho o ganar mucho? Hacer esto suena extraño si no tienes el conocimiento y las habilidades empresariales necesarias, pero te lo garantizo que sí es posible.

Empresario, hoy acabas de aprender que ser autoempleado no es el mejor camino para pasar los años siguientes de tu carrera empresarial. Reflexiona y toma decisiones que te ayuden a lograr más de lo que has soñado. No te quedes con las ganas y toma acción.