Enrique Escamilla

Las últimas semanas han estado inmersas en una polémica discusión en relación al flujo de migrantes sudamericanos que han ingresado a México en su paso hacia los Estados Unidos. 

El tema migratorio ha tocado sensibles fibras en la administración de Donald Trump, y esto ha tenido fuertes repercusiones en la política migratoria mexicana.

México se ha caracterizado siempre por tener una política amigable en el tema migratorio. Quienes entran de manera ilegal al país, son tratados como personas que si bien han cometido un ilícito, lo hacen por necesidad y no por dolo. Es por eso que a los migrantes en México se les ayuda a regresar a su país de origen y no se les criminaliza. 

 

Ante la postura radical de la administración estadounidense, México ha realizado un excepcional trabajo, dando trato digno a los migrantes. 

La migración debe ser considerada un derecho humano, y los países, si bien deben establecer controles adecuados para que se haga de manera ordenada y con civilidad, deben promover mecanismos adecuados para poder permitir a cualquier persona (que se conduzca en apego a la ley) poder habitar en un país diferente al de su nacimiento. 

¿Qué se gana en un país encarcelando al migrante que busca una mejor calidad de vida? ¿Cómo se puede establecer un mecanismo adecuado de control de migrantes? ¿Qué es un país sin gente?

Ciudadanos del mundo, es como debemos ver el futuro. 

 

@lafuentedeideas

@escamilla2000

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